Un mucocele/sialocele consiste en una extravasación de saliva en espacio submucoso o subcutáneo a partir de una glándula salivar¹.
   El sialocele es la patología más frecuente a nivel de las glándulas salivares^1-5 en perros, con predisposición en razas como caniche y pastor alemán^2,6, con una mayor prevalencia en animales menores de 4 años⁶. Las glándulas afectadas más frecuentemente son la mandibular y la sublingual denominándose  ránulas^1,4,7. Etiológicamente, pueden originarse debido a sialolitos, neoplasias, traumatismos² e incluso cuerpos extraños⁵ aunque en un gran número de casos son idiopáticos ^1,4,7.

   El conducto parotídeo se comunica con la cavidad oral a través de una papila ubicada en la mucosa próxima al cuarto premolar superior³. La sialografía es una técnica basada en la inyección transductal de contraste yodado a través de una cánula con el fin de visualizar correctamente los límites de esta en un estudio de imagen posterior^8,9.

   Un labrador, macho castrado, de 5 años de edad se presentó para la evaluación de una masa que le producía deformidad facial leve en la región mandibular derecha.

Se decidió realizar un estudio de Tomografia Computerizada (TC) y una sialografía de la glándula parotídea bajo anestesia general. Dicho estudio mostró una lesión ovoide (4.3 cm x 2.3 cm) subcutánea en la región mandibular derecha. Dicha lesión contenía material hipodenso en su interior (19 HU), la cual se continuaba caudo-dorsalmente, conformando un conducto tortuoso irregular que se comunicaba con el tejido de la glándula parotídea derecha.

Tras dicho estudio, se realizó un sialograma que confirmó comunicación de la lesión previamente descrita con dicho conducto, concluyendo su origen parotídeo y confirmando la existencia de una dilatación del conducto parotídeo en el paciente. Una muestra del contenido de la lesión confirmó la existencia de saliva.

Debido al coste de la cirugía, el propietario declinó tratamiento quirúrgico.

   Existe un estudio CT previo de sialografía en tres cadáveres (Kneissl, 2011) en el que se administró retrógradamente por el ducto de las glándulas salivares mandibular, zigomática y parotídea metilcelulosa con contraste. En este estudio se muestra que el sialograma es una técnica que posibilita  la correcta visualización de las glándulas salivares, de sus ductos y de estructuras periféricas a ellas. 

    La incidencia de patologías salivares es relativamente baja, por lo que es comprensible que no haya habido especial interés en el desarrollo de técnicas de imagen avanzada (como CT o MRI) para su visualización dado que sialografías analizadas a través de imágenes de radiología o la ecografía de la glándula son métodos efectivos y de menor coste que un CT o MRI. Sin embargo, la sialografía estudiada a través de técnicas de diagnóstico por imagen avanzado como en este caso permite una óptima identificación del origen de la lesión, de la glándula afectada y planificación previa a una posible cirugía. Entre sus ventajas, destaca la capacidad de evaluar con mucha más precisión que con radiología la extensión de la lesión, posibles anormalidades anatómicas, visión de afectación de estructuras de tejido blando circundantes y posibles sialolitos o cuerpos extraños gracias a la mejor resolución y a la capacidad de reconstrucción multiplanar. Por lo tanto, a pesar de tratarse de una técnica más costosa que la radiología, los autores recomiendan la realización de un sialograma en casos de sospecha de mucocele, tanto para diagnóstico como para ayudar en el tratamiento quirúrgico.