PERFIL DE AMINOÁCIDOS PLASMÁTICOS EN PERROS CON ENTEROPATÍA QUE RESPONDE A DIETA Y SU RELACIÓN CON EL ÍNDICE DE ACTIVIDAD CLÍNICA CIBDAI

Tipo:
Comunicaciones Libres
Presentación:
POSTER
Área temática:
MEDICINA INTERNA
Instituciones:
(1) Facultad de veterinaria UCM
Autores:
Cristina Higueras López (1)
David Díaz-Regañón (1)
Rosa Escudero (1)
Mercedes García-Sancho (1)
Fernando Rodríguez-Franco (1)
Angel Sainz Rodríguez (1)
Ana I. Rey Muñoz (1)
Objetivos del trabajo:

Las enteropatías crónicas se clasifican en función de la respuesta al tratamiento en enteropatía que responde a dieta (Food-responsive enteropathy o FRE), enteropatía que responde a antibióticos, enteropatía que responde a inmunosupresores y enteropatía que no responde (1) debido a la inexistencia actual de biomarcadores capaces de diferenciarlas. Sin embargo, a día de hoy se están investigando posibles parámetros que lleven a cabo esta tarea.

En medicina humana, numerosos estudios han demostrado alteraciones de determinados aminoácidos como el triptófano o la fenilalanina en pacientes con patologías gastrointestinales, concretamente con enfermedad inflamatoria intestinal o IBD (Inflammatory bowel disease)(2). En el campo de la veterinaria, los estudios sobre el perfil aminoacídico en pacientes con enteropatías crónicas son bastante escasos, aunque se han encontrado alteraciones significativas y con carácter prometedor. Este trabajo busca aportar nueva información sobre el perfil aminoacídico en perros con FRE en comparación con perros sanos, además de estudiar la correlación de alguno de estos aminoácidos con parámetros indicadores de la gravedad como el índice CIBDAI (Canine inflammatory bowel disease activity index)(3).

Material y métodos:

En el estudio se evaluaron 9 perros con FRE y 6 perros sanos. El criterio de inclusión de los perros FRE se basó en la existencia de síntomas gastrointestinales durante al menos 3 semanas de duración. Los perros presentaron una respuesta favorable a una dieta de eliminación basada en proteína hidrolizada o proteína novel después de 1 mes de administración. Además, se obtuvo información específica sobre los signos clínicos relacionados con patología gastrointestinal con el objetivo de calcular el índice clínico CIBDAI.

La extracción de sangre (recogida previa al cambio de dieta de eliminación) se llevó a cabo por venopunción de vena yugular. Todos los procedimientos y protocolos fueron aprobados por el Comité de Ética del Hospital Clínico Veterinario Complutense.

El perfil de aminoácidos plasmático fue analizado mediante cromatografía líquida (HPLC) (Agilent 1100) tras una extracción por solventes orgánicos, derivatización de las muestras y comparación de los tiempos de retención con los de una mezcla estándar de aminoácidos, según el procedimiento de Rey AI et al. (2020) (4).  

Los datos obtenidos se analizaron mediante el programa estadístico SAS (v.9.3) para valorar si existían diferencias significativas (P< 0,05). La correlación entre los distintos aminoácidos y el índice CIBDAI se llevó a cabo mediante el programa Statgraphics-18.

Resultados:

Los resultados del índice CIBDAI en los perros FRE fue de media 7± 1,8 (IBD moderado).

Los niveles de aminoácidos en plasma de los perros FRE fueron significativamente menores (P< 0.05) que los niveles de los perros control, a excepción de los aminoácidos alanina, tirosina y fenilalanina que no presentaron cambios significativos (tabla 1).

Al estudiar la correlación de los aminoácidos con el índice clínico CIBDAI, las proporciones de aminoácidos leucina y lisina fueron las que presentaron valores más elevados de correlación negativa con dicho índice (gráfica 1), seguido de las proporciones de fenilalanina que tuvieron una correlación positiva (r=0.54; P=0.03).

Discusión y conclusiones:

Existe poca evidencia científica del estudio del perfil aminoacídico en perros con patologías digestivas crónicas. En este estudio la mayoría de los aminoácidos analizados se encontraron disminuidos (a excepción de alanina, tirosina y fenilalanina) en los perros FRE en comparación con los sanos. Este déficit podría deberse al aumento del catabolismo proteico y a una menor absorción intestinal como consecuencia del proceso inflamatorio que se produce en la enfermedad. Tamura et al. (2019) encontraron niveles plasmáticos de metionina, prolina, serina y triptófano disminuidos en perros con IBD en comparación con perros control(5). En otro estudio en el que se evaluó el perfil de aminoácidos en perros con enteropatía que responde a inmunosupresores, se observaron niveles séricos de tirosina, fenilalanina y triptófano disminuidos (6). Se ha de tener en cuenta el efecto tipo de muestra (plasma o suero) a la hora de comparar los resultados, además de la escasez de información actual para la extracción de datos concluyentes, siendo necesarios estudios adicionales.

En el intento de correlacionar los aminoácidos con parámetros utilizados en la actualidad para clasificar la gravedad de la enfermedad, se ha encontrado una correlación negativa entre el índice CIBDAI y los aminoácidos leucina y lisina. La acción anabólica de los aminoácidos sobre la proteína muscular se lleva a cabo sobre todo por los aminoácidos esenciales, teniendo la leucina un papel destacado en esta función(7). Muchos de los perros diagnosticados con enteropatía crónica presentan pérdida de peso o incluso pérdida de masa muscular. Al ser este uno de los parámetros evaluados por el índice CIBDAI, explicaría la correlación negativa entre la gravedad y los niveles inferiores de estos dos aminoácidos. Tamura et al. (2019) en perros con IBD encontraron una correlación negativa entre la serina y el CCECAI (Canine chronic enteropathy clinical activity index)(5,8), siendo el único estudio disponible hasta la fecha que correlacione aminoácidos con índices de gravedad. Es por ello necesario continuar investigando el papel de los aminoácidos en las patologías gastrointestinales crónicas.

Conclusiones:

Se han observado cambios en el perfil de aminoácidos en pacientes con FRE, presentando los niveles de algunos de estos aminoácidos (leucina y lisina) relación inversa con el índice de gravedad CIBDAI. Es necesario profundizar en el estudio con el objeto de evaluar su posible carácter diagnóstico y potencial tratamiento.

Bibliografía:

1.          Dandrieux JRS, Mansfield CS. Chronic Enteropathy In Canines: Prevalence, Impact And Management Strategies. Veterinary Medicine (Auckland, NZ). 2019;10:203–14.

2.          Bauset C, Gisbert-Ferrándiz L, Cosín-Roger J. Metabolomics as a promising resource identifying potential biomarkers for inflammatory bowel disease. Vol. 10, Journal of Clinical Medicine. MDPI; 2021. p. 1–25.

3.          Jergens AE, Schreiner A, Frank DE et al. A Scoring Index for Disease Activity in Canine Inflammatory Bowel Disease. Vol. 17, J Vet Intern Med. 2003.

4.          Rey AI, de-Cara A, Calvo L, Puig P, Hechavarría T. Changes in Plasma Fatty Acids, Free Amino Acids, Antioxidant Defense, and Physiological Stress by Oleuropein Supplementation in Pigs Prior to Slaughter. Antioxidants. 2020;9(1):56. Available from: https://www.mdpi.com/2076-3921/9/1/56

5.          Tamura Y, Ohta H, Kagawa Y et al. Plasma amino acid profiles in dogs with inflammatory bowel disease. Journal of Veterinary Internal Medicine. 2019 Jul 1;33(4):1602–7.

6.          Benvenuti E, Pierini A, Gori E et al. Serum amino acid profile in 51 dogs with immunosuppressant-responsive enteropathy (IRE): A pilot study on clinical aspects and outcomes. BMC Veterinary Research. 2020 Apr 22;16(1).

7.          Makanae Y, Fujita S. Role of Exercise and Nutrition in the Prevention of Sarcopenia. Journal of nutritional science and vitaminology. 2015 Nov 24;61 Suppl:S125–7. Available from: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/26598823/

8.          Allenspach K, Wieland B, Gröne A, Gaschen F. Chronic enteropathies in dogs: evaluation of risk factors for negative outcome. Journal of Veterinary Internal Medicine. 2007;21(4):700–8.