La diabetes mellitus en una enfermedad endocrina muy frecuente en gatos. Se estima que aproximadamente entre un 17,8% y un 24,8% de los gatos diabéticos tienen hipersomatotropismo, que se traduce en una resistencia al tratamiento con insulina por una producción endógena de hormona de crecimiento. Está asociada a la presencia de una hiperplasia o adenoma secretor de la glándula pituitaria y los posibles tratamientos descritos incluyen cirugía, radioterapia y tratamiento médico. En humanos y gatos, la cirugía es el tratamiento de elección. Sin embargo, estos tratamientos pueden suponer un elevado coste económico. La cabergolina es un fármaco económicamente asequible, que inhibe la secreción de la hormona de crecimiento y que se usa en personas con hipersomatotropismo. En veterinaria, recientemente se han publicado diversos artículos sobre el uso de este fármaco con resultados dispares. Por ello, el objetivo del presente caso clínico es describir el caso de una gata con hipersomatotropismo y diabetes con buena respuesta a la cabergolina.