Las técnicas de osteosíntesis en huesos largos han evolucionado de forma constante, gracias a la evaluación critica de resultados clínicos, desde el principio AO original de Reducción abierta y Fijación interna (ORIF), con énfasis en la estabilidad mecánica, hasta a un abordaje más biológico de la cicatrización ósea. Este cambio de paradigma nos ha llevado a un nuevo abordaje filosófico denominado Osteosíntesis de Mínima Invasión o MIO. El éxito del MIO se debe en gran parte a la implementación de nuevos abordajes quirúrgicos y al desarrollo de implantes de ángulo estable, ya sean placas o clavos acerrojados. Esta presentación describirá las indicaciones MIPO y MINO y los resultados clínicos, así como sus limitaciones y complicaciones.